Puerto Rico a cambio de Grecia
El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble, quien ha jugado un papel decisivo en la crisis griega, indicó a modo de broma que la Eurozona admitiría a Puerto Rico como miembro si Estados Unidos se queda con Grecia.
Desde la perspectiva europea, en ese supuesto intercambio, Estados Unidos se quedaría con la peor parte.
Según reporta el servicio especializado Bloomberg, Schaeuble habría hecho “la propuesta” al secretario del Tesoro estadounidense, Jack Lew, hace unos días.
“Le ofrecí a mi amigo Jack Lew estos días que nosotros podemos aceptar a Puerto Rico en la Eurozona si los Estados Unidos estaban dispuestos a tomar a Grecia en la unión bajo el dólar”, habría dicho Schaeuble.
Según el ministro alemán, Lew le habría respondido diciéndole que pensaba que se trataba de un chiste.
De acuerdo con Bloomberg, Schaeuble hizo sus expresiones el jueves en un evento en Frankfurt.
Los ministros de la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional (FMI) intentan descifrar alguna alternativa para el país heleno, luego de que el 61% de los votantes de Grecia rechazara las condiciones impuestas por éstos para que pueda otorgarse otra parte del programa de rescate financiero aprobado en 2010.
Grecia tiene hasta esta tarde para presentar una contraoferta a las exigencias de la llamada Troika, que entre otras cosas, exigió en principio aumentar la edad de jubilación hasta los 67 años y aumentar y aplicar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a más bienes.
Mientras Grecia adeuda unos $353,000 millones a sus acreedores, la deuda pública de Puerto Rico ronda unos $72,000 millones, lo que implica una relación de deuda a Producto Interno Bruto de 172% y 69%, respectivamente.
El ingreso per cápita de Puerto Rico también es superior al de Grecia.
Mientras la deuda de Puerto Rico está principalmente en manos de inversionistas privados, Alemania es el principal acreedor de Grecia.
Según Bloomberg, aún si Lew aceptara la oferta de su contraparte alemán, quedaría por verse si Puerto Rico aceptaría el intercambio.
Puerto Rico encara la posibilidad de múltiples litigios de parte de los acreedores, ahora que el gobernador Alejandro García Padilla ha planteado que la deuda “es impagable”.
Grecia no tendría la ayuda de la Troika
Por otro lado, también estaría por verse si el país heleno aceptaría el intercambio.
Aunque Grecia no podría devaluar su moneda a menos que regrese al dracma, su participación en ese sistema unificado le ha permitido acceder a $240,000 millones como parte de un programa de rescate.
En el caso de Puerto Rico, aún cuando las facciones políticas en la Isla han contribuido con millones de dólares a las campañas de políticos estadounidenses demócratas y republicanos, el territorio estadounidense no ha logrado que se apruebe una extensión del capítulo 9 del Código de Quiebras federal. Ello permitiría que las corporaciones públicas del gobierno puertorriqueño puedan optar por un mecanismo de bancarrota si lo necesitan.
Asimismo, un intento de Puerto Rico por legislar un mecanismo de resolución con sus bonistas también fue rechazado, luego de que el Primer Circuito de Apelaciones declarara inconstitucional una ley a esos efectos.
Los puertorriqueños son ciudadanos estadounidenses, pero no tienen congresistas -salvo un representante que no tiene voto- ni votan por el presidente de los Estados Unidos. En contraste, miles de puertorriqueños han participado en todos los conflictos armados encabezados por la principal economía del mundo.
Pese a un ciclo de estancamiento económico que alcanza una década, al colapso de una cuarta parte del sector bancario del territorio estadounidense y a la incapacidad del gobierno de presentar un presupuesto balanceado en dos décadas, el Tesoro federal y la Casa Blanca han planteado que no rescatarán a Puerto Rico, pero le brindarán “ayuda técnica”.
La única expresión formal y pública de Lew con respecto a Puerto Rico se produjo en abril pasado. En ese momento, y mediante una llamada telefónica, Lew instó al liderato político en Puerto Rico a aprobar “un prespuesto creíble”.
Joanisabel González/ elnuevodia.com