LA ALTAGRACIA, República Dominicana.- El gobernador de la provincia La Altagracia, Rafael Barón Duluc, ha tenido que involucrarse para impedir que se hagan embargos irregulares contra empresas y personas particulares, por lo que considera que los embargos deben hacerse con la fuerza pública y la presencia de un juez de paz, en caso que las puertas estén cerradas.

Además informó que los alguaciles que cometan exceso y hagan procesos irregulares serán llevados hasta la Suprema Corte de Justicia para fines de sanciones disciplinarias, para evitar que se convierta en un río de sangre con esos embargos irregulares donde hay notificaciones en el aire, sin previo aviso a los demandados.

Explicó que se esta dando la tarea de alguaciles sin la presencia de un juez de paz y de la fuerza pública penetran a propiedades sin la presencia de su propietario y se llevan artículos, entre ellos prendas, dinero, inmuebles, sin ser notificados; ya que a veces se llevan inmuebles que no son ni de las personas que están embargando, como han hecho en uno de los hoteles de la zona donde la Asociación de Hoteles y Proyectos Turísticos del Este denunció ayer que en los últimos tres meses siete de sus miembros han sido víctimas de embargos irregulares.

En consecuencia la Asociación de Hoteles y Proyectos Turísticos del Este llamó la atención de la Procuraduría General de la República, la Suprema Corte de Justicia y la Policía Nacional para que investiguen y lleven hasta las últimas consecuencias la epidemia de “embargos-asaltos”, que afecta a los inversionistas del sector hotelero.

La organización describe como una “plaga que corroe la imagen de las autoridades y la justicia dominicana, la reiterada ejecución de embargos contra hoteles de la región burlando los procedimientos, principalmente actuando con notificaciones falsas”.

Explica el Gobernador Rafael Barón Duluc que en las primeras 15 semanas del año se produjeron siete actuaciones de este tipo realizadas a partir de sentencias secretas que nunca fueron conocidas por las empresas hoteleras afectadas para que no pudieran defenderse de ellas y en todos los casos se hizo lo que se conoce en el ambiente judicial como “notificaciones en el aire”.

Los hoteles perjudicados en el 2011 son Bahía Príncipe, Ifa, Palladium, Occidental, NH, Moon Palace y Nouvelle Frontier.

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