Santo Domingo.-

Los propietarios de bancas de apuestas se han convertido en un grupo pujante dentro de la política dominicana, llegando a ostentar en la actualidad importantes cargos congresuales y municipales, así como otras posiciones claves dentro del Gobierno.

Los actuales servidores públicos que tienen esa doble condición han utilizado sus fortunas y labor social en las comunidades donde tienen incidencia para ocupar una determinada posición electiva.

El negocio no es para menos, ya que en el país las bancas de apuestas legalizadas reportan en su conjunto ventas superiores a los 300 millones de pesos diariamente, según datos publicados por EL DÍA en junio de 2014.

Caras sobresalientes

En la Cámara de Diputados hay más de diez legisladores propietarios o accionistas de consorcios diseminados en todo el país.

Dentro de ellos se destaca el diputado perredeísta por Santo Domingo Virgilio Merán Valenzuela, dueño de Virgilio Sport, un prominente consorcio de banca de apuestas con cientos de establecimientos.

Merán Valenzuela inició sus negocios en 1986. Los mismos se establecieron originalmente en Sabana Perdida.

“A partir de ahí iniciamos una labor social en Santo Domingo Norte y en los tiempos difíciles siempre hemos dado la mano amiga y todo ha sido fruto de los beneficios que hemos obtenidos de este negocio”, comentó a EL DÍA Merán Valenzuela.

El legislador también es el dueño del consorcio Banca de Lotería Virgilio, que tiene registrados 125 puntos de ventas, según datos de la Dirección de Casinos y Juegos de Azar del Ministerio de Hacienda.

Faltando cerca de un año para finalizar su primer periodo en la Cámara Baja, Merán Valenzuela ya ha anunciado sus aspiraciones por la Alcaldía de Santo Domingo Norte.

Otro diputado que tiene una fuerte presencia en dichos negocios es Francisco Santos Sosa, representante de Santiago. Este legislador es el dueño de Banca Nave, un consorcio muy popular de la Ciudad Corazón y zonas aledañas con 125 puestos formales.

Además, aunque con menos auge, están vinculados a este negocio los diputados Santos Ramírez y Rafael Abreu, representantes de Baní y San Cristóbal, respectivamente.

Pero sin dudas, la figura más sobresaliente en el Congreso es el senador de Santiago Rodríguez, Antonio de Jesús Cruz Torres, propietario de uno de los consorcios de bancas de apuestas más “poderosos” de la región cibaeña, el cual lleva su nombre.

Tras constituir todo un emporio económico con los juegos de azar, este legislador llegó al Senado de la República en las elecciones congresuales y municipales de 2006.

Fue reelecto en el periodo 2010-2016 con proyección de quedarse en el cargo por cuatro años más.
Las oficinas de las Bancas de Lotería Nacional Antonio Cruz, S. A., se encuentran en un edificio de varios niveles en la avenida Estrella Sadalhá en Santiago.

Juancito Sport

Es el nombre de bancas de apuestas más relacionado a un político en el país. Esta marca, propiedad del actual alcalde de Santo Domingo Este, Juan de los Santos, se ha establecido prácticamente en todo el país, especialmente en la región Norte.

El funcionario que ostenta ese cargo desde 2006 fue diputado en 2002. “Si el sector banca se decide apoyar a cualquier estructura política o crear una estructura política que lo represente como tal y trabajar por ella, en cinco o seis meses te podría definir un entorno electoral en el país”, estimó Michel Dicent, director Ejecutivo de la Federación Nacional de Bancas de Lotería (Fenabanca).

Gobernadora Santiago

A la larga lista de banqueros que han emigrado a la política se suma Aura Toribio, gobernadora de Santiago, segunda ciudad en importancia del país.

Toribio, quien incluso es expresidenta de la Fenabanca, fue coordinadora del Sector Externo y enlace de los dueños de bancas de loterías con el candidato y hoy presidente de la República Danilo Medina.

Junto a su esposo manejaba el consorcio Carlito Sport. La funcionaria, que también se relaciona a la venta de vehículos, está aspirando a la Alcaldía de Santiago.

Presidente del Moda

El Movimiento Democrático Alternativo (Moda), que está entre las cinco principales organizaciones políticas del país, recibió gran impulso del sector banca para ubicarse en su actual posición.

Es tanta la influencia de dicho negocio que su presidente y fundador Emilio Rivas es el propietario del consorcio Banca La Esperanza, que tiene 391 puntos registrados en el Ministerio de Hacienda.

Dicha organización, que cumplirá apenas ocho años en noviembre, ha superado con creces a otros partidos minoritarios que tienen más años de haber sido fundados.

En las elecciones de 2016 el Moda irá unido al partido oficialista. Los alcaldes de los municipios de Pedro Brand y Estebanía, en Azua, Pascual Ramón Gómez (El Mello) y Francisco Matos Sánchez, también son propietarios de bancas de apuestas.

Matos Sánchez dirige el consorcio conocido en la región Sur del país como Banca Polea. Además, Domingo de León Mascaro, quien es miembro del Comité Político peledeista, maneja la franquicia de bancas La Solución.

Eldia.com

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